Sabemos que Chacao ocupa un porcentaje muy pequeño dentro del territorio de Caracas pero aun así, son dignos de reseñar muchos de los proyectos desarrollados por la Alcaldía de ese municipio para los ciudadanos. Esta semana por distintas razones -trabajo y disfrute- pasé una buena parte de mi tiempo en ese pedazo de ciudad que nos ayuda a pensar que sí es posible rescatarla de la desidia y el abandono en que la tienen sumida muchas de sus autoridades y pobladores.
Asistí por primera vez a una cata de café promovida por
Cultura Chacao. El anfitrión fue Jean Paul Coupal, de Arábica Café, un apasionado conocedor del café, ese fruto que vino para quedarse y para mejorar en olor y sabor con nuestro clima.
La cata es, sin duda, una experiencia muy agradable que nos abre un mundo de conocimientos y sensaciones. En esta ocasión, probamos dos tipos de café originarios de sendas haciendas venezolanas y otro, que es el resultado de varios años de experimentación para producir una mezcla absolutamente aromática y de sabor único.
Cultura Chacao organiza catas de chocolate, vino, café, oporto, ron y aceite de oliva. Para reservar hay que llamar los primeros días de cada mes a los teléfonos:
2864122 y 2864556. Otro IMPERDIBLE en Caracas.
Aunque el mayor trabajo en redes peatonales es el que se hizo en la avenida Francisco de Miranda y el que se hará en el mismo casco central de Chacao, tal como lo anunció el Alcalde este jueves, la mayoría de sus calles tienen aceras decentes y libres de basura. Lo mínimo que se requiere para desplazarse por ellas. Fue caminando, precisamente, que me topé con dos de las intervenciones pictóricas que hace ERGO sobre las casetas destinadas al resguardo de las intalaciones en la zona.
Pero para cubrir mayores distancias, especialmente cuando el sol ataca sin clemencia como en estos días, se implementó un sistema de transporte colectivo denominado
TRANSCHACAO con unidades limpias y en perfectas condiciones que se detienen en paradas demarcadas y bien señalizadas.
Carecemos de tantas cosas, que hasta detalles que son nimios en cualquier ciudad, en la nuestra se crecen y se agradecen mucho más.
Sabemos que Chacao ocupa un porcentaje muy pequeño dentro del territorio de Caracas pero aun así, son dignos de reseñar muchos de los proyectos desarrollados por la Alcaldía de ese municipio para los ciudadanos. Esta semana por distintas razones -trabajo y disfrute- pasé una buena parte de mi tiempo en ese pedazo de ciudad que nos ayuda a pensar que sí es posible rescatarla de la desidia y el abandono en que la tienen sumida muchas de sus autoridades y pobladores.
Asistí por primera vez a una cata de café promovida por Cultura Chacao. El anfitrión fue Jean Paul Coupal, de Arábica Café, un apasionado conocedor del café, ese fruto que vino para quedarse y para mejorar en olor y sabor con nuestro clima.
La cata es, sin duda, una experiencia muy agradable que nos abre un mundo de conocimientos y sensaciones. En esta ocasión, probamos dos tipos de café originarios de sendas haciendas venezolanas y otro, que es el resultado de varios años de experimentación para producir una mezcla absolutamente aromática y de sabor único. Cultura Chacao organiza catas de chocolate, vino, café, oporto, ron y aceite de oliva. Para reservar hay que llamar los primeros días de cada mes a los teléfonos: 2864122 y 2864556. Otro IMPERDIBLE en Caracas.
Aunque el mayor trabajo en redes peatonales es el que se hizo en la avenida Francisco de Miranda y el que se hará en el mismo casco central de Chacao, tal como lo anunció el Alcalde este jueves, la mayoría de sus calles tienen aceras decentes y libres de basura. Lo mínimo que se requiere para desplazarse por ellas. Fue caminando, precisamente, que me topé con dos de las intervenciones pictóricas que hace ERGO sobre las casetas destinadas al resguardo de las intalaciones en la zona.
Pero para cubrir mayores distancias, especialmente cuando el sol ataca sin clemencia como en estos días, se implementó un sistema de transporte colectivo denominado TRANSCHACAO con unidades limpias y en perfectas condiciones que se detienen en paradas demarcadas y bien señalizadas. 
Carecemos de tantas cosas, que hasta detalles que son nimios en cualquier ciudad, en la nuestra se crecen y se agradecen mucho más.
.....incontables "caminando por Chacao" suceden cuando el mirar desde la percepcion se hace indispensable en el vivir.... entonces la expresion es inevitable...las cosas pequenas o grandes de una ciudad que trata de hacer algo desde el profundo foso historico en que toda ciudad se encuentra....el mirar detecta el esfuerzo casi heroico....caminando mucho mas lento y pausado aun, como sin rumbo fijo, aparecen otras dimensiones de la ciudad que soy yo mismo....
ResponderEliminarEs bien interesante seguir tus recorridos, Mitchele. Aunque es muy probable que nunca conozca Chacao, me ha gustado mucho seguirlo con tu mirada.
ResponderEliminarUn abrazo.
... Te estás convirtiendo en la cronista de la ciudad. Buena reseña la de Chacao y sus actividades para la gente.
ResponderEliminarUn abrazo.
CZA
El sábado 12 regresé a Tarragona, Catalunya, de mi primer viaje a Venezuela. De manera no prevista, que es como casi siempre salen mejor las cosas, tuve la oportunidad de participar en la cata de café ofrecida por Jean Paul. Hoy, recordándolo, y mientras me tomo un té con un sabroso Toronto de Nestlé (no se lo digan a Jean Paul) he llegado a tu blog.
ResponderEliminarPoner en la maleta un pequeño paquete de café molido (una aberración según pude saber en la sesión teórica previa a la cata) ocasionó que la Guardia Nacional retuviera mi maleta jajaja. Aunque quién sabe si la causa fue el paquete de café en grano que compré tras la cata…
Saludos desde la orilla del Mediterráneo donde comienza a vislumbrarse la llegada del otoño.
Carmen!! Ya sé quién eres!! recuerdo tu pregunta envuelta en risas al final de la sesión de tostado del café: ¿Puedes decirnos quién más hace buen café? Ja,ja.
ResponderEliminarEspero que vuelvas pronto a Caracas. Eres bienvenida y gracia spor pasearte por aquí también.
Michele:
ResponderEliminarGracias por tu comentario en mi blog TINTA INDELEBLE.
Son verdades que hay que decir porque, a estas alturas, la mujer no las ha ganado todas.
Un abrazo,
Carmen Guédez
Cg