Durante 10 días Caracas se llenó de libros. Hoy termina la 2a edición del Festival de la lectura organizado por Cavelibros, auspiciado por la Alcaldía de Chacao y donde decenas de editoriales ofrecieron sus publicaciones -con atractivos descuentos- a cientos de miles de caraqueños.
Una 2a edición exitosísima con un público ávido de leer y sobre todo, de disfrutar sus espacios públicos. Allí vi de todo. Desde clásicos a precios solidarios con nuestros devaluados bolsillos hasta libros que valen su peso en oro, pasando por ese género que cada día crece y gana adictos, la autoayuda; varios stands dedicados a los niños; colecciones y mucha literatura venezolana.
En mi primera visita salí con dos títulos. La vida nueva de Orhan Pamuk (Alfaguara 2006) a un irresistible precio de Bs. 40 ( $5,71 de los de verdad, porque los oficiales no existen...) ,confiando en que la traducción de Rafael Carpintero sea fiel al espírititu del Nobel Turco y, un criollísimo Se habla venezolano editado por Puntocero que compila 12 historias que laten con Marcapasos.
Pero hoy vuelvo, antes de que baje el telón hasta el año que viene.
Una 2a edición exitosísima con un público ávido de leer y sobre todo, de disfrutar sus espacios públicos. Allí vi de todo. Desde clásicos a precios solidarios con nuestros devaluados bolsillos hasta libros que valen su peso en oro, pasando por ese género que cada día crece y gana adictos, la autoayuda; varios stands dedicados a los niños; colecciones y mucha literatura venezolana.
En mi primera visita salí con dos títulos. La vida nueva de Orhan Pamuk (Alfaguara 2006) a un irresistible precio de Bs. 40 ( $5,71 de los de verdad, porque los oficiales no existen...) ,confiando en que la traducción de Rafael Carpintero sea fiel al espírititu del Nobel Turco y, un criollísimo Se habla venezolano editado por Puntocero que compila 12 historias que laten con Marcapasos.
Pero hoy vuelvo, antes de que baje el telón hasta el año que viene.
Fotografías: Odoardo Rodríguez
Ha sido un evento urbano de trascendencia. ¡Saludos amiga!
ResponderEliminarHermosas fotos Mitch
ResponderEliminarrealmente fué un espacio maravilloso, sorprende gratamente ver como Caracas también puede vestirse de palabras, arroparse con poesía y acariciar con tinta y papel
un abrazo