sábado, 12 de abril de 2008

CIRCO SIN PAN NI CARPA

Múltiples son las caras del trabajo a la intemperie. Un montículo de concreto "pensado" para que algún fiscal dirija el tránsito a pitazo limpio, se convierte en plataforma de sencillas maromas. Basta un ula-ula, un poco de equilibrio y la necesidad de llevar a casa unas monedas para cambiar por pan. La generosidad y la paciencia de los transeuntes dura lo mismo que la luz roja.

Otras veces, a falta de trapecio buenas son guayas. Abajo no hay red. Mucho menos aplausos. Sólo la acera pura y dura por donde corren peatones que no alzan la vista en dirección a las estrellas, ni a las relucientes fachadas.

Fotografías: Arq. ODOARDO RODRÍGUEZ

6 comentarios:

  1. Da vértigo pensar en las consecuencias de no ir bien asegurado. En cualquier circo, cuando los trapecistas evolucionan, un segundo fatal es el hilo del que pende la desgracia...

    Besos, Mitchele.

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  2. Justamente antes de leer tu post semanas atrás vengo pensando en un relato que tiene omo título tentativo "la vida es un circo", en ella hacemos de presdigitadores, de malabaristas, domadores,payaso, presentador, dias que somos elefante, mono,tigre o perro saltarín. Vivimos con la carpa a cuestas, armándola en cada esquina, en la casa, en la oficina, con los amigos.

    Otro comentario:
    Excelentes imágenes Mitch para ilustrar tu post.
    Haaaa... y la imagen del encabezado del post (el retrovisor) esta simplemente FA BU LO SA .

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  3. Hola Mitch, me encanta la foto del encabezado y sinceramente que la necesidad pareciera tener cara de
    versatilidad e improvización

    Un abrazo

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  4. Gracias por los positivos comentarios sobre la foto del encabezado!

    Esa foto es producto de una de las laaaaaaargas colas de nuestra querida ciudad. Aproveché la ocasión para documentar cómo los motorizados serpentean el breve espacio entre un carro y otro. La velociad de ellos y la inmovilidad mía hizo el resto...

    Un beso,

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  5. Siempre tuviste una sensibilidad especial, eres como un ángel y en mi diccionario hay una foto tuya justo al lado de la palabra ternura.

    Por otro lado, yo trabaje en ese edificio por 7 años!
    Blast from the past!

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  6. Genial. Tuve la chance de conocer Venezuela hace unos meses. Estuve 15 días por ahí, liquidé mis vacaciones. Es más, nunca antes había salido de mi país. Me alegra dar con tu blog, es como una conexión con esa ciudad que todavía no dejé del todo.

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