Lamentablemente, en esta ocasión tus ojos no te engañan. Lo que estás viendo ES una niña. Desnuda. Indefensa. A la espera de que su madre o quien quiera que haya asumido la responsabilidad de cuidarla, se ocupe de ella. Triste estampa sin duda alguna. Tomada no en cualquiera de los puestos de "economía informal " -eufemismo estúpido que esconde el desamparo de miles de ciudadanos de nuestro país en plena edad productiva, que buscan el sustento a la intemperie en jornadas interminables de 12 horas diarias- sino en el mercado de Baruta.
¿Por qué hago esa salvedad? Pues porque el mercado que se instala todos los sábados en la vía pública de ese pueblo fundado en 1620 y que forma parte de nuestra ciudad, no es improvisado. Está profundamente arraigado en la vida de todos los habitantes de esa zona y de las contiguas.
Hola Michele, gracias por mandarme tú blog, me encantó. Admiro la capacidad que tienes para dedicarte a realizar un trabajo que requiere de tiempo, dedicación y mucho amor por esta pobre ciiudad que tanto hemos padecido en los últimos años.
ResponderEliminarTe deseo lo mejor y mucho éxito.
Fco M.